Se trataba de un partido entre los 24 socios fundadores, divididos en dos equipos de doce jugadores cada uno, con Enrique Goiri como árbitro. Se dice que el agua que usaban para sus refrescos se sacaba de la tinaja en la que se lavaban los jugadores. Ignacio de Gortázar, el conde de Superunda, que acabó casado con la hermana de Manuel Allendesalazar. Manuel Allendesalazar, que fue Presidente del Consejo de Ministros y alcalde de Madrid. El primer presidente del Athletic Club de Madrid fue Enrique Allende, quien dejó el cargo el mismo año, siendo sustituido por Eduardo de Acha. El Español de Madrid retó al Athletic de Madrid a jugarse el campeonato más tarde, pero el club de Del Acha rechazó el desafío, y no se presentó el 29 de marzo, fecha señalada para la supuesta final. La inscripción para el campeonato era libre pero, a pesar de eso, solo se inscribieron tres clubs: El Athletic de Bilbao, el Español de Barcelona y el Madrid FC.
Alberto Zarraoa, que fue presidente del Athletic de Bilbao 5 años después. No es tan fácil”, opina el presidente federativo. El nuevo Gobierno andaluz del popular Juanma Moreno echa este lunes a andar con una hoja de ruta, que se fue desvelando la semana pasada, tanto en el Parlamento, durante el debate de investidura, como en la toma de posesión del presidente de la Junta de Andalucía el pasado sábado, a pie de calle, ante la imponente fachada barroca del Palacio de San Telmo de Sevilla, sede de la Presidencia del Ejecutivo andaluz. Enrique Allende, el que había sido nombrado primer presidente del Athletic Club de Madrid, no cumplió con las expectativas que se tenían sobre él. ª La Sociedad será una sucursal del Athletic Club de Bilbao. Más tarde, el Iberia y la Sociedad Gimnástica Alemana utilizaron también dicho campo. El 2 de mayo de 1903, con motivo de la rememoración de la Guerra de la Independencia, se jugó el primer partido del Athletic de Madrid en el Campo del Retiro.
Aquel año, el Athletic de Madrid no pudo participar en la Copa de España, por su norma de no enfrentarse en competición oficial a su homólogo de Bilbao, pero sí le cedió varios de sus mejores jugadores para que pudiesen jugar en el torneo. Eustaquio Celada, que había sido delantero del Madrid la temporada anterior. El 19 de agosto de 2013, tras la mala situación económica del club y ser una de las fichas más altas del equipo, los administradores concursales obligan la salida de Zé Castro de la entidad para que puedan llegar nuevas incorporaciones al equipo y pueda adecuarse el salario mínimo establecido al club. Ambos equipos no podían enfrentarse en partidos oficiales ni participar en la misma competición oficial al ser considerados el mismo club. La Guerra Civil quebró también lo que pudo ser el renacimiento deportivista. En su paso hacia lo desconocido encontrará distintas figuras: un mentor y un ayudante, que le prestarán la mano y le servirán en los momentos en los que haya retos y tentaciones (que los habrá). Al no hacer nada la Federación para evitarlo, el Athletic se proclamó campeón y se marchó a Bilbao, Copa en mano.
El 26 de abril de 1903, un grupo de estudiantes vizcaínos de la Escuela Especial de Ingenieros de Minas, formado por Ramón de Arancibia y Lebarri, Ignacio Gortázar y Manso, Ricardo Gortázar y Manso, y Manuel de Goyarrola y Alderna, entre otros, decidió fundar un equipo sucursal del Athletic Club de Bilbao, el cual se denominó Athletic Club de Madrid. Darío de Arana y Urigüen, que había sido portero del Madrid hasta el año anterior, y que fue el primer capitán de la historia del equipo. Esa historia se repite los siguientes encuentros, en Santander de libre indirecto dentro del área; en Coruña frente a la UD Las Palmas, a la limón con un defensa canario; y finalmente contra el filial colchonero, de un impecable cabezazo. Con el tiempo, llegaron a montar un pequeño negocio durante los partidos, vendiendo refrescos de jarabe de limón y de agua de cebada a 10 céntimos el vaso. Junto al frontón se encontraba la casa de la señora María y su hijo Casimiro, que dejaban una habitación para hacer de caseta arbitral, y también facilitaban una tinaja con agua para que los jugadores se pudiesen asear.